El retrato en exterior, parte II

Esta semana desvelamos la segunda parte de Cómo enfrentar una sesión en exteriores y no morir en el intento de nuestro compañero Juan Carlos Alvarado. 

Si no leíste la primera parte de este post, El retrato en exterior, parte I léelo y luego vuelve a entrada para terminar de aprender los trucos que nos da Juan Carlos.

Seguimos.

¿Qué equipo debo utilizar?
Accesorios

Aunque en fotografía existen una gran cantidad de accesorios que nos permiten poder manipular la luz, para este artículo que es más simple, vamos a mencionar sólo algunos que pueden estar al alcance de cualquiera.

Para estar preparado para las situaciones más comunes en una sesión de exteriores es recomendable como mínimo contar con algunos accesorios que nos pueden ayudar a mejorar los resultados.

Los más accesibles y comunes son:

  • Un reflector: este sencillo pero útil accesorio nos permite trabajar tanto con luz natural como con luz artificial, su uso más común es para rebotar luz en él y rellenar sombras o dar un toque de luz a algunas zonas de la fotografía. Existen varias alternativas de reflector, pero el más recomendable es el llamado 5 en 1, el cual, además de ser plegable y fácil de llevar, tiene cinco superficies de distintos colores y características que lo hacen muy versátil.

REFLECTOR

  • Un flash externo: el flash externo puede utilizarse, tanto en situaciones de poca luz como en casos en los que queremos de alguna forma modificar las condiciones lumínicas de una escena con fines creativos. Sirve tanto como luz principal o como luz de relleno.

FLASH

Ejemplos de fotografías de retrato en exterior

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Fotografía utilizando luz natural rebotando luz mediante un reflector color plata para dar luz al rostro de la modelo

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Fotografía utilizando luz natural + un flash a la izquierda de la modelo para dar luz al rostro de la modelo

La idea

La idea es la razón de ser de una sesión de retrato, es lo que la inspira. No se trata de hacer fotos sin motivo ni razón, lo primero que debemos preguntarnos antes de realizar una sesión es ¿porqué y para qué vamos a hacerla? y a partir de esta respuesta comenzaremos a planificar el resto de los detalles.

La idea no necesariamente tiene que ser algo complejo, pero siempre debemos partir de algo.

El retratado

En una sesión de retrato, la persona a fotografiar es la gran protagonista y, por tanto, de ella depende en gran medida el resultado. Lo ideal sería que el fotógrafo conozca a la persona que va a estar delante de la cámara, pero muchas veces esto no es posible.

Es muy recomendable intentar tener un primer encuentro antes de que se realice la sesión con la idea de romper un poco el hielo y tratar de conocerse un poco.

El escenario

El sitio escogido será el fondo que acompañe a las fotos, debe tener coherencia con la idea.

Las características del escenario nos ayudarán a determinar el tipo de iluminación a utilizar, que hora es la más adecuada para realizar las fotos (por el comportamiento de la luz), etc. Es importante que no olvidemos que el escenario debe acompañar al retratado y no robarle protagonismo.

La luz

Como hemos dicho en alguna ocasión, sin luz no hay foto, así que éste es un aspecto al que hay que prestarle especial atención. Cómo queremos que sea la luz en nuestras fotos:

  • ¿Natural, artificial, ambas?
  • ¿Dura o Suave?
  • ¿Cálida o Fría?
  • ¿Mucho o poco contraste?

La respuesta a estos interrogantes son la clave para obtener la estética que deseamos para nuestras fotos, además de que nos van a orientar sobre cómo vamos a iluminar. Por ejemplo, si vamos a trabajar con luz natural debemos buscar la mejor hora del día en la que debemos hacer la sesión de acuerdo a cómo queremos que sea esa luz, si vamos a trabajar con flash, entonces podemos decidir si usar algún modificador para obtener el resultado deseado.

Otros aspectos importantes

Para lograr un resultado óptimo, hay detalles que si bien no son indispensables, pueden ayudar mucho, así que si está en nuestras manos debemos procurar resolver cosas como:

  • Maquillaje
  • Peluquería
  • Estilismo
  • Atrezzo

Considerando todos los puntos tratados seguramente podremos realizar con éxito cualquier sesión en exteriores que nos propongamos.

 

¡Gracias Carlos!

Consejos prácticos para hacer fotos en otoño

Estamos en la estación del año preferida por los amantes de la fotografía y es que da muchísimo juego. Nos regala luces preciosas que se mezclan entre los colores rojo, naranja y amarillo, sus hojas decoran cada uno de los paisajes y de las tomas y esta estación del año tiene un sentimiento de añoranza que podemos plasmar en cada fotografía.

Todo lo anterior es verdad pero todos sabemos que no es fácil saber jugar bien con esta época del año para sacar una buena toma. Así que aquí van unos mini consejos para salir a perderse con la cámara este otoño:

1. El amanecer y el atardecer

La salida y la puesta de sol son los momento perfectos para recoger esa luz que necesitas. El ángulo de incidencia de la luz solar consigue que se resalten esos colores rojizos y amarillentos que destacan en el otoño. 

2. Combinación de colores o un único color

Aprovechemos todos los colores que nos ofrece esta época del año. Dependiendo del tipo de árbol podemos encontrar diferentes colores en sus hojas. 

Combina diferentes tonalidades para darle variedad en el color o directamente elige un color en concreto que le de riqueza a tu fotografía.

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3. Cambios diarios

En esta época del año los cambios en el paisaje se producen a diario así que prepárate para observar el entorno día tras día, familiarizarte con él y así no dejar escapar ninguno de los cambios que se van produciendo en él.

4. El macro

Como apasionado del macro, recomiendo que a parte de fotografiar paisajes con distintas focales cortas utilicemos el macro para sorprendernos con los detalles que nos ofrece el otoño.

Probad a fotografiar una hoja y descubriréis un sinfín de colores, texturas y formas en la misma.

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5. El balance de blancos

Sencillo, ajustamos el balance de blancos en nuestra cámara a modo nublado para conseguir unos colores más vivos.

6. Subexponer un poco

Si el sol se filtra a través de las hojas amarillas, la medición de tu cámara nos puede jugar una mala pasada. Por eso, para conseguir unos colores bien expuesto probad con el truquito de subexponer un poco la foto.

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7. Filtro polarizado

Son muy útiles en un entorno natural por dos razones:

  • Eliminan reflejos sobre superficies no metálicas, por ejemplo el agua. Las hojas acumulan agua por humedad, el filtro te ayudará.
  • Realzan el color de las plantas.

8. Hojas, hojas y más hojas

Si por algo destaca el otoño es por las hojas de los árboles. Observadlas y buscadlas porque no están solo en los árboles las encontraréis por el suelo, volando llevadas por el viento o en el lugar menos esperado.

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Y ahora solo queda coger tu cámara, buscar el lugar ideal y aplicar estos 8 mini consejos.